Red Bull no se cansa de realizar eventos que deja a muchos boquiabiertos. En esta ocasión, los Alpes en la ciudad austriaca de Kitzbühel, ha sido el escenario elegido por la marca de bebidas energéticas para que el piloto holandés Max Verstappen realizar una demostración con el RB7 en la nieve.
"Fue realmente especial. No fue solo pilotear en la nieve, sino hacerlo en la cima de la montaña. El escenario era increíble, lo disfruté mucho y creo que todos los aficionados lo disfrutaron como yo lo hice. Nunca había piloteado este tipo de auto en la nieve o sobre el hielo, nunca pensaría en un auto de Fórmula 1, así que fue realmente impresionante", comentó Max Verstappen.
"La principal dificultad era la que se esperaba - estaba realmente deslizante. A eso hay que adicionar el hecho que era sobre la falda de la montaña. Estás en la cuesta y no quieres iniciar deslizándote ni cometer errores. Los chicos realizaron un trabajo fantástico para hacerlo un poco más fácil, pero aún así era todo un reto. Fue realmente interesante, haciéndolo más difícil para el piloto que de alguna manera hace todo para realizar el mejor trabajo", finalizó el piloto de Toro Rosso de 18 años.
En esta ciudad se realizará del 19 al 24 de enero el campeonato mundial de esquí.